Yo, polluela, estoy de acuerdo contigo en todo, pero también tengo que comentar el tema de la religión. Brevemente porque no tengo mucho tiempo (ya sabes), y porque llámame y nos tiramos de los pelos en condiciones (pa qué está el móvil XD).
Me temo que la religión -toda, en términos generales, pero más comunmente la católica, en la actualidad- es el chivo expiatorio de todos los males. Quien nos oprime no es la religión, ni los curas, a quienes si se quiere no se les hace el menor caso y listo. A mí me oprime mi jefe, el banco, los que ponen el petróleo a millón y luego me toca a mí pencar con las consecuencias, el que me pide 30 millones por un piso, los de timfónica que nos tienen a todos hechos unos desgraciados en este país, los políticos, los terroristas, y mil elementos de ese jaez de los que deberíamos acordarnos más y con más frecuencia a la hora de protestar. Pero no veo que se monte ninguna manifestación frente al Banco de España, no. Nos quejamos de la Iglesia porque siempre es bueno que haya gato en casa para echarle las culpas. No nos atrevemos a liársela a quien realmente nos jode la vida, así que nos volvemos a quien menos nos oprime, paradójicamente (¡y es la verdad! A mí quien me impide hacer mi vida son los anteriormente mencionados, no la Iglesia Católica, quien jamás se ha interpuesto en mis intenciones de comprarme un piso o raparme el pelo como el último mohicano. En cambio, el Euribor y mi jefe siempre tienen algo que decir al respecto). Como me dijo alguien una vez: nos putea todo el mundo, pero lo arreglamos quemando una iglesia.
Cambiando de tercio: he hablado con Liv. Que podríamos hacer algo para octubre. Pero con fecha, que si no, no me organizo con el tema de la logística. ¿Qué me dices?
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Date: 2008-09-02 05:38 pm (UTC)Me temo que la religión -toda, en términos generales, pero más comunmente la católica, en la actualidad- es el chivo expiatorio de todos los males. Quien nos oprime no es la religión, ni los curas, a quienes si se quiere no se les hace el menor caso y listo. A mí me oprime mi jefe, el banco, los que ponen el petróleo a millón y luego me toca a mí pencar con las consecuencias, el que me pide 30 millones por un piso, los de timfónica que nos tienen a todos hechos unos desgraciados en este país, los políticos, los terroristas, y mil elementos de ese jaez de los que deberíamos acordarnos más y con más frecuencia a la hora de protestar. Pero no veo que se monte ninguna manifestación frente al Banco de España, no. Nos quejamos de la Iglesia porque siempre es bueno que haya gato en casa para echarle las culpas. No nos atrevemos a liársela a quien realmente nos jode la vida, así que nos volvemos a quien menos nos oprime, paradójicamente (¡y es la verdad! A mí quien me impide hacer mi vida son los anteriormente mencionados, no la Iglesia Católica, quien jamás se ha interpuesto en mis intenciones de comprarme un piso o raparme el pelo como el último mohicano. En cambio, el Euribor y mi jefe siempre tienen algo que decir al respecto). Como me dijo alguien una vez: nos putea todo el mundo, pero lo arreglamos quemando una iglesia.
Cambiando de tercio: he hablado con Liv. Que podríamos hacer algo para octubre. Pero con fecha, que si no, no me organizo con el tema de la logística. ¿Qué me dices?
¿Te llamo a la noche y lo hablamos? Hale.